Como viene siendo habitual, la noticia de la jornada de acerca de la Overwatch League viene cargada de dualidades. Parece que ya se está convirtiendo en normal que a cada noticia negativa sobre la popular liga de esports de Blizzard, le siga otra en sentido contrario alabando las bondades de la misma. Es el caso de hoy de Rogue y los recientemente conocidos Dallas Fuel.

 

Según se ha podido ver en Twitter, Rogue, el equipo de esports de Las Vegas, anunciaba ayer que desmantelaba su sección de Overwatch al no haber podido hacerse con una plaza para la primera temporada. Tal y como explican en el tweet, el equipo ha intentado todo lo que ha podido para conseguir un slot, incluyendo asegurar el dinero y completar todos los procesos de aprobación por parte de Blizzard. Sin embargo, en esta ocasión no se ha debido a problemas deportivos o económicos, simplemente no han sido aceptados por Blizzard. Así pues lo jugadores quedan libres para fichar por otros equipos.

 

Sorprende en la noticia la decisión de Blizzard. Es la primera vez que un equipo que SI desea participar en la OWL y que tiene la posición económica para hacer frente al pago inicial de $20 millones, no lo logra por motivos de selección que no conocemos. Y más cuando se trata de Las Vegas, que se está rigiendo como una ciudad muy importante para los esports, con leyes que apoyan incluso las apuestas en al ciudad. Quizás sea rivalidad con Los Angeles, quizás Blizzard no quería más equipos americanos para no desequilibrar la balanza… El caso es que Rogue no ha sido aceptado.

 

Como siempre los detractores de OWL han visto otro motivo cargar sus iras contra la desarrolladora y por viene a colación la segunda noticia del día, la protagonizada por los Dallas Fuel. Teniendo detrás a Team EnVuYs y una inversión de $35 millones por parte de Hearsh Interactive Group, y habiendo mostrado su nombre y logotipo la semana pasada, hoy mismo su CEO Mike “hastr0” Rufail era preguntado en Twitter por Joven White de Dexerto  y Jacob Wolf, de ESPN.

 

Las preguntas giraban en torno a si merecía la pena pagar $20 millones por una liga que no parece que vaya a cumplir las expectativas en cuanto a audiencias, por lo menos con los datos actuales del juego (hoy mimo hemos dado a conocer esos datos en eSports Bureau gracias a Gamoloco). La respuesta de Rufail ha sido clara y concisa a favor de la Liga: “Si nos basamos en esto (comentarios previos de la cadena de tweets), CS:GO tampoco tenía un gran número de usuarios al principio. Démosle tiempo”.  La cadena de tweets continuaba tornándose ciertamente tensa, con acusaciones veladas de quien sabía más de esports o no, quien estuvo desde el principio en el sector, etc, hasta que Rufail zanjó el asunto volviendo a apelar de nuevo al tiempo.

 

Y la verdad es que sin saber cómo funcionará y sin tener todavía mucho datos desvelados, por lo menos muchos de los que interesan a nivel de negocio, lo único cierto es que Rufail tiene razón. Puede que la inversión sea un éxito o no (lo que no cabe duda es que $35 millones para HIG por “una aventura” como esta es un precio irrisorio si les sale bien), pero ese es el riesgo que se corre cuando se invierte y por estar los primeros, y eso es algo que hasta bien entrado el año que viene no sabrá nadie hasta que no se puedan ver los primeros datos de audiencia de la OWL y sensaciones de quienes de verdad importan y generan el negocio: los espectadores.